La canadiense deja a un lado la purpurina para darnos una imagen un tanto más sobria, con su disco a lanzarse este viernes.
El mencionar la “purpurina” es algo alegórico a lo que hoy en día está de moda entre los jóvenes, pero al mismo tiempo haciendo referencia a los alegres ritmos que caracterizan sus dos trabajos “Emotion” y “Emotion: Side B”. En esa especie de “revival” de sonidos ochenteros, la cantante canadiense recibió muchas críticas positivas y se dió el lujo de hacer diversos proyectos interesantes, como por ejemplo hacer una seguidilla de conciertos junto a la Orquesta Sinfónica de Toronto.
Pero hoy nos encontramos frente a un tema más traido a su realidad personal: la ruptura en una relación. Si bien se podría esperar que esté hablando de un novio, la artista comentó que se trata de el rompimiento con un gran amigo y colaborador de ella. Aparentemente, y de acuerdo a una reciente entrevista a NPR, el disco recorrerá las distintas fases de una relación, como así también la soltería y la familia. Varias canciones han sido reveladas a lo largo de estos últimos meses y, si bien tienen un ritmo bastante jovial y con influencia en otras décadas, se puede observar esa conexión más bajada a tierra. Creemos que esto se puede encontrar más presente en las canciones “No Drug Like Me” y “Party for One”.
¿Pronta presencia en Argentina? Por el momento, nada anunciado. La cantante si ha venido al país en 2013, sin embargo como artista soporte. Esperemos que próximamente venga a deleitar a sus fans sudamericanos con este tour que, por el momento, tiene algunas fechas por Europa y un extenso paso por Estados Unidos.