La semana pasada, tuvimos el placer de conversar con el aclamado conductor de orquesta Paul Bateman. Siendo también un virtuoso pianista y compositor, el comenzó su carrera dentro del mundo de la lírica, para luego empezar una galardonada carrera como conductor. Hoy cuenta con una larga trayectoria de colaboraciones, ya sea en recitales, conciertos u trabajos discográficos, junto a José Carreras, Sarah Brightman, Bryn Terfel, Joseph Calleja, entre muchísimos más. En medio de su apretada agenda, el Maestro se tomó un momento para hablar con nosotros de sus nuevos proyectos, del mundo del Classical Crossover al cuál ha contribuido mucho a lo largo de los años y de sus deseos de pronto venir a Argentina.
A lo largo de tu carrera, tuviste el placer de trabajar con una basta cantidad de artistas.¿Existe algún momento en particular el cuál recuerdes como el “highlight” de tu profesión?
“He tenido tantos, pero siempre va a existir uno que fue sumamente especial para mí. Fue en el año 2013, en Osaka (Japón), al acompañar al incomparable José Carreras en concierto. Su talento siempre fue de vital influencia en mi vida por lo que fue una experiencia mágica el tenerlo junto a mí en el escenario. Realmente nunca lo voy a olvidar.”
Estando a este punto de tu carrera ¿Vos seleccionas con que material trabajar cuando sos convocado a conducir una orquesta?
“Rara vez tengo la posibilidad de elegir material, sin embargo, eso está por cambiar. Recientemente fui elegido como Director de la Orquesta Sinfónica Nacional del Reino Unido, así que por fin tendré más oportunidades de planear repertorios.”
Particularmente, cuando pensamos en el estilo “classical crossover”, se nos viene a la mente una variedad de cantantes con los cuales haz trabajado. Cuando se trata de adaptar un aria o pieza del mundo académico a este estilo musical ¿Qué es lo que se tiene que tener en cuenta?
“Cada proyecto “crossover” es diferente, así que tengo que adaptarme a cada uno de ellos. Siempre trato de permanecer fiel al compositor y de no abaratar la música. A veces, hacer un aria en otro idioma puede resultar grandioso y a veces un desastre, pero siendo que yo crecí profesionalmente en el ambiente de la ópera, siempre trato de respetar la esencia de las obras originales.”
A lo largo de la historia, hemos sido testigo de muchos admiradores de la lírica que han demolido a criticas este estilo de canto e interpretación. ¿Porqué crees que sigue ocurriendo hoy en día, estando tan instaurado en el mundo de la música?
“Yo creo que es porque algunos proyectos dentro de ese estilo fusión suelen cometer el error de despojar a las piezas líricas u orquestales de su grandeza, así que entiendo lo que pueden llegar a pensar los acérrimos amantes de la ópera. Pero eso no quita que se hayan generado increíbles proyectos en el classical crossover; en cada estilo siempre hay buena música… ¡solo hay que hacerlo bien!”
Una de tus últimas colaboraciones de estudio involucra el tan esperado albúm de la soprano inglesa Sarah Brightman ¿Qué nos podes adelantar de este nuevo trabajo discrográfico?
“Hice cuatro arreglos completamente para este nuevo proyecto de Sarah Brightman, conduciendo la Orquesta Sinfónica de Londres para los mismos en el legendario estudio Abbey Road – ¡uno de mis lugares preferidos!. Siempre es especial poder trabajar con ella, aún luego de colaborar por 23 años en sus proyectos.”
¿Actualmente estas trabajando en algún otro proyecto o preparandote para alguna gira?
“Ahora me encuentro trabajando con el violinista británico Daniel Hope, en un proyecto que involucra obras de Bernstein y Copland. También, dentro de poco, tengo unos conciertos programados junto a la Orquesta Filarmónica de Londres, siendo el primero de ellos en honor al legendario Michel Legrand. Inclusive hasta hace poco fui requerido por la BBC para hacer unos arreglos orquestales de último momento, así que hay mucho trabajo por hacer.”
Finalmente debemos preguntarte ¿Algún plan de visitar Argentina próximamente?
“¡Me encantaría alguna vez estar en Argentina! Aún no tuve la oportunidad y para los conciertos que Sarah tiene pactado en Sudamérica, no fui requerido dado a que no la acompañará una orquesta sinfónica, sino una banda y ensamble. Pero estoy seguro de que algún día iré.”
Agradecemos al Maestro Paul Bateman por su tiempo y esperamos verlo en Buenos Aires próximamente, hasta entonces, estamos a la expectativa de escuchar a una de sus más grandes colaboradoras: Sarah Brightman en el Teatro Colón.
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